Es la mayor fiesta costumbrista de Azángaro, por cuanto involucra a todos sus distritos, centros poblados y comunidades. Los azangarinos, a través del carnaval, celebran el florecimiento de las chacras, el crecimiento del ganado y agradecen a la Pachamama por sus muchos favores.

Con participación preponderante de los jóvenes, quienes cantan al son de las wifalas, las tradicionales fiestas se cumplen, con ligeras variaciones, con el desarrollo de la Semana de los Compadres y Comadres, que no es otra cosa que la visita entre parientes para alegrarse por el verdor de las chacras.

Asimismo, se realiza el “Viernes de Chaku”, que consiste en la captura, esquila y entrega de animales (perdices o patos, codornices, vizcachas, zorros, etc.), a las autoridades, luego de lo cual se los libera. En esta fiesta no faltan las bebidas, agradecimientos, picapicas, serpentinas y mixturas.

Luego se efectúa el Sábado y Domingo de Carnavales, que comprende el “Siñalaska” en algunos distritos, en tanto que en otros se cumple el sábado de Chaku Apaykuy; el domingo se realiza la Entrada del Ño Carnavalón.

El lunes se desarrollan las costumbres “Qaynachinakuy”, “Wasi Tikachay”, “Chaqra Ti’kachay”, “Siñalay”, y otros. El martes se hace el “Chiuchico Azangarino”, que consiste en recorrer las calles bailando al compás de pinquillos y tambores (unucajas); y el miércoles, jueves, viernes, sábado y domingo de cuaresma se disfrutan los “cacharparis”.